Campamento Namutoni (PN Etosha), 20 de septiembre 2009
Nos levantamos a las 5:30 y volvemos a la charca, pero no hay ningún rinoceronte, solo una hiena. Tomamos el camión y nos pasamos la mañana viendo animales, Jirafas, Cebras, Ñus, Onix, Impalas, Chacales, Warthogs, …
Vamos hacia el Pan, el Salar y andamos sobre el con él camión por una senda marcada. Al final del camino bajamos y nos hacemos fotos de grupo en el blanco infinito que nos rodea, es una sensación de inmensidad sin limites. Todo es blanco y perdemos el horizonte.
Continuamos viendo animales, Southen yellow-billed hombill, Elefantes, Kudus, Cebras, Ñus, Alcefalos Bucefalos, Orix, Great Egret, Garzas, Gacelas Saltarinas, Red-footed falcon, Mangostas, Jabalíes, Chacales de lomo negro, Estorninos Negros (Cape Glossy Sterling), … Me encantan las Jirafas bebiendo con sus piernas bien abiertas para poder llegar al agua. Es una imagen muy carismática que nos cautiva.
Llegamos al Campamento Namutoni donde Lucky nos prepara la comida y montamos las tiendas. Comemos ensalada de arroz, un frankfurt, pollo rebozado y sobras de pescado de ayer. Lavo un poco de ropa y me baño en la piscina. Cargo pilas en las tomas que hay al lado de cada parcela del campamento.
A las cuatro y media volvemos a salir con el camión en busca de animales y regresamos poco antes de las siete. Vemos Mangostas (Banded Mangose), Crison – Breasted Shrike, Burdell’s Starling, Gallinas de Guinea, Damara dik dik, Jirafas, Buitres, Kudus, Cebras, Águilas, Southen Yellow-Billed Hornbill, Steenbok, Estorninos Negros (Cape Glossy Starling), Abutardas, Backs Mith Lapwing y Elefantes.
En un momento dado una manada de elefantes pasa a nuestro lado. Nos impresionan, pero nos sentimos a salvo protegidos por el camión. Hay familias enteras con pequeños elefantes que son nuestra delicia. De vez en cuando siento la mirada de algunos clavada en mi frente y pienso en aquello de que los elefantes nunca olvidan. Se acordarían de mi si me volvieran a ver solo por ese pequeño instante en que nuestras vidas se han cruzado. Solo puedo sonreír ante esta idea. Quizás, quizás, quizás, …
Muchos de los animales que hemos visto se reúnen alrededor de las charcas y constituyen una hermosísima imagen. Conviven amistosamente, aunque tal vez en ocasiones haya alguna riña. De vez en cuando su silueta se refleja en el agua con elegancia y al final del día el sol se vuelve rojo y también busca mirarse en el agua mientras se despide buscando refugio en el horizonte.
Por la noche cenamos espagueti a la Boloñesa y después de cenar me voy con Isa a ver la charca, pero no vemos nada.
